Hola mis queridas amigas el día de hoy quiero compartir con ustedes algunos tips para reconocer que tipo de piel tenemos, ya que a salud interior se refleja en la belleza exterior.
Si tu piel no es perfecta, no te preocupes, puedes hacer mucho para mejorarla. Una piel hermosa es en gran parte el resultado de una buena salud, factores hereditarios y cuidados externos. Debes tener en cuenta que las necesidades del mayor órgano del cuerpo cambian con las estaciones del año y el clima, y su cuidado depende de varios factores como el tipo de piel, edad, salud interior y el medio ambiente.
PIEL SENSITIVA: Es muy delicada, ligeramente seca y sensible a reacciones alérgicas. Los cambios en la temperatura, y los cosméticos fuertes o abrasivos causan irritación.
PIEL GRASOSA: Se caracteriza por una sobreproducción de sebo y aceites que provocan espinillas, poros abiertos, puntos negros y barros. Requiere cuidados especiales para evitar sobresecarla.
PIEL SECA: Esta piel produce poco aceite natural. Con el sol, el viento y la contaminación ambiental esta condición se agrava. Requiere humectantes y ácidos grasos omega 3 en la dieta.
ENEMIGOS DE LA PIEL SALUDABLE: No dormir suficiente, comida procesada, el alcohol, fumar, estrés, una vida sedentaria. Esto también exige mayor trabajo de nuestros órganos especiales del hígado y usa o destruye nutrientes vitales lo que puede conducir a alergias, problemas cutáneos, fatiga, envejecimeinto prematuro y algunas serias enfermedades.
NO AL ACEITE MINERAL
Cuando compres cosméticos, lee los ingredientes, evitar comprar productos que contengan aceites mineral, que a veces los cosméticos mas caros lo utilizan. El aceite mineral obstruye los poros, creando así una barrera que previene la evaporción de agua a través de la piel. Al obstruir los poros puede producir brotes de acné.
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